Monitores de partículas atmosféricas

El método BAM para el control de partículas en el aire mide continuamente la concentración másica de PM ambiental recogida en una cinta de filtro de vidrio con una resolución temporal de un minuto. Utiliza una geometría de muestreo en línea en la que se mide la atenuación de los rayos beta a través del medio filtrante y se muestrea simultáneamente la PM. Esto permite que el muestreo ambiental se realice prácticamente durante 60 minutos cada hora. También permite realizar mediciones de rayos beta durante prácticamente toda la hora, mejorando así la sensibilidad y la resolución temporal.

Estos dispositivos se basan en tecnología óptica y están diseñados para su uso en salas blancas : entornos cerrados y controlados que emplean sistemas de filtración y control de parámetros ambientales para purificar el aire interior en procesos de fabricación e investigación, como los de semiconductores, biotecnología, farmacia, militar/aeroespacial, medicina y envasado de alimentos. Las clases de salas blancas ISO definen el número de partículas en suspensión en el aire por metro cúbico permitido. Las pruebas de validación se utilizan para establecer puntos de control periódicos o continuos en los que se emplean contadores de partículas de precisión para medir el aire. También pueden utilizarse en otros entornos, como escuelas, universidades y centros deportivos.

El método gravimétrico (de pesaje) consiste en aspirar aire a través de un filtro previamente pesado y recoger las partículas en el filtro. A continuación, se retira el filtro y se vuelve a pesar. Aunque es ampliamente utilizado por los organismos reguladores, incluidas las EPA, no es ideal porque sólo proporciona datos medios para el periodo en que el filtro estuvo desplegado y no mide en tiempo real. No obstante, puede ser útil para obtener una instantánea rápida de las PM en un lugar con el fin de determinar las ubicaciones para un control más intensivo.